martes, 28 de diciembre de 2010

Sorpresas te da la vida

Qué curioso es vivir a veces. Resulta que se vuelca contigo quien menos te esperas y de quien lo esperas no recibes absolutamente nada.
Este embarazo está siendo muy clarificador para nosotros. Eso es bueno, aprendemos y rectificamos.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Creciendo, a lo ancho y en el calendario

¿Qué mejor plan que pasar mi cumpleaños comprando bragas desechables, discos de lactancia y compresas tocológicas?
Eso me preguntaba yo el sábado pasado, una vez que conseguí salir de casa a pesar de las contracciones. Lo de ser madre y responsable puede derivar en situaciones estúpidas como ésta.
Al menos a la visita a la parafarmacia siguió una agradable comida con mi media naranja y una peli de adultos en el cine, la primera en mucho tiempo y la última en años, yo creo.
Todo ello felizmente interrumpido por llamadas de felicitación.
Avanzo con decisión por la senda de los cuarenta.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Ahí va esa mujer del mañana

Y yo venga decir que no quería tener una niña, que quería un niño, que pa qué la parejita, que ninguna ilusión por tener una hija que son más cariñosas....
¡¡¡Pues toma niña!!!! y anda que no es inquieta la muchacha, que se pasa dia y noche entrenando para la maratón de Nueva York. Cuando nazca saldrá andando por el pasillo a conocer a los abuelos tan fresca la tía.
Bueno, no es que no la vaya a querer, claro. Mi niña ya tiene nombre y es esperada con toda la ilusión del mundo, por supuesto, pero que sea una chica le añade una dificultad que no tienen los chicos, creo yo.
Al contrario que mucha gente, no quiero que mis hijos se parezcan a mí y por eso mismo creo que hoy día educar a una niña es mucho más difícil que educar a un niño. Querría que fuera independiente pero no fría, fuerte pero no insensible, solidaria pero no ingenua. Alguno me dirá ¿y no quieres lo mismo para el chico? Sí claro, pero sigo pensando que con ellos es más fácil.
De momento, ya he dado instrucciones a las abuelas para que nunca en mi presencia le pongan a la nena una de esas coletitas en la frente, un kiki, ni le compren leotardos sin mi permiso. Es un trauma de la niñez, lo confieso.

Mi niña, más cerca

Mi embarazo cumplió ayer 28 semanas. Por fin las 28 semanas, la frontera teórica a partir de la cual mi hija sobreviviría si decidiera nacer ya, aunque sé que hay prematuros que nacen antes y salen adelante.
Después de 9 semanas de reposo, experimento cierta sensación de meta volante alcanzada, por más que han estado llenas de ansiedad, preocupación, soledad e impotencia. Me consta que ha habido personas que han pensado que mi situación es un chollo: obligada a estar en casa, en la cama, sin ir a trabajar pero cobrando tan ricamente, con los demás haciéndome todo...
Pues no señores, señoras y señoritas, ningún chollo. No he estado pintándome las uñas, ni comiendo chocolate delante de la televisión, que malditas las ganas que tenía de ver la televisión.
Ningún chollo cuando se tiene tanto miedo, tantas dudas y cuando la culpa te ronda cada vez que te levantas de la cama y aparece una nueva contracción. Pero tienes que hacerlo porque tienes que llegar a la cocina y hacerte algo de comer, qué menos que alimentar lo mejor posible al bebé.
Pero de todo esto la mayoría no se ha enterado.

miércoles, 2 de junio de 2010

Gracias Silvio

Él no lo sabrá nunca, pero hoy Silvio Rodríguez me ha salvado vía You Tube.
Me ha salvado de la estupidez (ajena), del aburrimiento (propio), de la incompetencia (empresarial) del calor de un edificio estúpido, de los bloqueos informáticos que se han cepillado una hora de trabajo y de las malas noticias laborales (conyugales)
Ojalá, Unicornio, Te doy una canción, Mujer con sombrero, La maza, Canción del elegido... o cómo recordar lo importante recordando palabras bellas.

viernes, 21 de mayo de 2010

Apuntes sobre Venecia

Luna de miel en Turistalandia. Digo.... en Venecia. Muy bonitos los canales, muy bonitos los puentes, muy bonitas las góndolas. Avancemos.
Para no olvidar:
- El primer paseo, por el barrio judío. Los venecianos dejaron que los judíos se instalaran en la ciudad por el dinero que traían pero les confinaron en un gheto que aún hoy impresiona.
- Las mazmorras del Palacio Ducal. Se conservan las inscripciones que grababan los presos en la piedra de las paredes o entre los barrotes de las ventanas, con fechas de hace siglos. Alguien había lanzado una rosa de tallo larguísimo a una de las celdas cerradas al público. Se veía por un minúsculo agujerillo.
- El paseo en góndola por la noche. Todo silencio, todo quietud.
- Los nuevos esposos pedaleando por el Lido en un cochecito turístico.
- El buffet de desayunos del hotel, que nos procuró una razonable ración diaria de fruta y que sufrió tremendo expolio de unidosis de Nutella.
- La sensación de "... a tomar por saco el plano, llegaremos aunque sea por Cuenca".

martes, 11 de mayo de 2010

Novia de 40

Me arrepiento de no haber sido madre antes pero desde luego no lamento haber sido una novia de 40. Con lo boba bobísima que yo era con 20 años, tengo la satisfacción de haber organizado nuestra boda casi como he querido y de haber disfrutado de todo como creo que no hubiera hecho hace un tiempo.
Si no hubiera tenido 40 años, cómo soportar el árduo debate entre mi madre, mi suegra y dos dependientas sobre el lazo que mi vestido llevaba en la espalda, cómo decir a la maquilladora que la sombra de ojos malva que me puso el dia de la prueba era sencillamente espantosa, cómo superar la dificilísima elección (y pago) de las alianzas.
Con 20 años me hubiera disfrazado de quien no soy y me habría acompañado de un montón de "secundarios". Así, conseguí que no me sobrara ni me faltara nadie.
... y si hubiera tenido 20 años me habría comprado un camisón muy blanco, con mucho encaje y muy cursi para la noche de bodas. Cosa que, por supuesto, no hice.

lunes, 19 de abril de 2010

No crezcas tan deprisa

Cada vez que llevo a Vïctor a cortar el pelo sale de allí con cara de más mayor que cuando entró.
Creo que el peluquero tiene unas tijeras mágicas que a medida que cortan mechones hacen crecer a los niños.

miércoles, 14 de abril de 2010

Pero si no había ordenadores en el XIX

Mi compañero acaba de llegar de Haití, donde ha estado por trabajo durante una semana.
Esta mañana, al encender su ordenador, éste había sufrido un cruce de cables y tenía como fecha 14 de abril de 1829.
Me ha parecido tan tierno... Un buen escritor podría crear un relato con esto.

lunes, 5 de abril de 2010

¿Y qué se perdieron ellos?

En una revista dirigida a la mujer moderna leo a Ana Ripoll, rectora de la Universidad Autónoma de Barcelona: "El cargo de catedrático requiere una dedicación importante que una mujer ve limitada cuando es madre, por eso llegamos más tarde a este puesto". No percibo en la cita resentimiento alguno pero el tono del reportaje sobre las mujeres en la universidad da a entender que una mujer en ese caso ha salido perdiendo porque su vida familiar ha ralentizado su carrera. Me parece una visión "masculinizada" de la vida, basada tan sólo en el éxito profesional.
No es noñez afirmar que la vida familiar también es fuente de satisfacción personal, aunque parece escandalizar a cierto tipo de feminismo. ¿Y qué hay de los hombres que han descuidado, a veces tanto, su vida familiar?. Los hombres también se estaban perdiendo muchas experiencias, mucha vida. Hoy día, tengo compañeros que se han negado a abandonar el turno de noche porque significaría no ver apenas a sus hijos, amigos que prefieren trabajar en casa y a mi propia pareja le costaría mucho aceptar un trabajo que le robara ver como crece nuestro niño.
Al igual que estoy en contra de las cuotas para mujeres, me es muy difícil trasplantar el modelo "masculino" a mi papel de madreyesposatrabajadoranopuedoconlavida. Espero que superemos pronto los roles del feminismo "masculinizador", que vayamos hacia una visión que combine para todos el trabajo y la vida familiar y nos haga más felices... aunque lleguemos un poco más tarde.
A mí, de momento, no me empujen, por favor

jueves, 4 de marzo de 2010

Lo que dice papá

Planteado a Carlos el tema de mi anterior post, me contestó tan tranquilo: "Estoy bien. Me siento útil. En casa y como padre"
Después de ésto, no necesito explicar por qué me caso con él

miércoles, 3 de marzo de 2010

Los roles

Víctor lleva dos días con fiebre muy alta y placas en la garganta. Según definición del pediatra "de caballo". Como Carlos no trabaja ahora, él se está encargando de todo: consulta, farmacia, tomas de antibiótico, control de la fiebre... En realidad, lleva semanas siendo el que lleva la casa, sabiendo lo que hay en la nevera y en el congelador, poniendo lavadoras y tratando con la muchacha que viene a limpiar los miércoles.
Y a mí me está quedando el papel de padre de los de antes. Papá hace de mamá y mamá hace de papá.
A pesar de que ni mi educación ni mi carrera profesional han estado condicionadas por el hecho de ser mujer, compruebo que quedan en mi subconsciente retazos de otros tiempos que me llevan a ser algo rígida en el tema de los roles.
Mamá se siente extraña haciendo de papá.