viernes, 12 de agosto de 2011

Feliz de trabajar y de volver a casa

Loca de contenta volví a trabajar. Me daban ganas de abrazar las columnas de la redacción después de nueve meses y medio fuera de aqui y a todo el que quisiera escucharme le contaba las enormes ganas que tenía de volver. Al parecer, es habitual que con el primero las mamás suframos mucho al reincorporarnos pero que con el segundo ya admitamos sin complejos que no vemos el día de volver a tener vida propia.
Pero después de unos días compruebo que el regreso al trabajo tiene otro beneficio más para mí: vuelvo a casa con unas ganas locas de ver a mis niños y me paso la tarde encantada de la vida haciéndoles caso y con Mónica en brazos. Nada que ver con el día en que según entraba Carlos por la puerta le solté a la niña, agarré las llaves del coche y salí corriendo.
Espero que con la llegada de septiembre termine de una vez este año horribilis

No hay comentarios: